Los desafíos son prácticas de laboratorio o proyectos basados en problemas, que siguen la recomendaciónAAAS Project 2061, un proyecto de reforma de la educación científica de los Estados Unidos. Estos ejercicios son lo opuesto de las prácticas de laboratorio tipo receta de cocina, descritas paso por paso. En lugar de ello, estimulan a los estudiantes para que trabajen por su cuenta para desarrollar soluciones a los diversos problemas o desafíos que se plantean. Los desafíos varían en cuanto al contenido y la duración (desde cincuenta minutos hasta tres semanas) y constan de dos partes básicas. En primer lugar, en la práctica de laboratorio se les pide a los estudiantes que resuelvan un problema dado. En segundo lugar, se le pide a los estudiantes que creen un producto. Por ejemplo, una práctica de laboratorio simple de 50 minutos de duración para el primer semestre podría ser "Construya un cable de conexión que funcione correctamente". Una práctica de tres semanas para aprender tareas más complejas se podría denominar "Práctica de laboratorio para realizar el cableado del aula de computadores de la escuela". El Día de la Red es un buen ejemplo del aprendizaje basado en desafíos y alentamos su incorporación a las clases. |